Asturies alcanza un nuevo record de pueblos abandonados, sumando más de mil entre los vacíos completamente y los que solo tienen a una persona en ellos; otros 3.000 no superan los 10 habitantes

Asturies es la nación del Estado que más rápido pierde pueblos por el abandono el mundo rural, sin que exista ninguna política enfocada a frenar esta dinámica. Más aún, las acciones del «Principado» parecen encaminadas en el sentido contrario, ello es, a centralizar más aún todo en la famosa «Área Metropolitana», condenando a la Asturies más rural, aquella que más conserva nuestras señas identitarias, a la desaparición. La concepción de la agricultura y la ganadería exclusivamente desde el punto de vista económico, al margen de la realidad socio-cultural del entorno mantiene a la población rural en una situación discriminatoria, por la ausencia de ayudas y de servicios públicos, que aseguren unas mínimas condiciones de calidad de vida.

La falta de servicios y oportunidades empuja a la juventud fuera de los pueblos y la falta de gente joven en ellos empeora las condiciones de vida de quienes se quedan. Los datos aportados por el INE al respecto son, año tras año, devastaores: 880 pueblos desiertos, otros 321 a punto de serlo, 3.000 más en el límite… unos datos tanto más calamitosos cuanto en las ciudades el problema de la vivienda lleva a alquileres descomunales para el nivel de vida y a deshaucios diarios.

Llucía F. Marqués

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