Andecha Astur acaba de presentar ante el Centro de Patrimonio Mundial de la Unesco una denuncia en la que solicita con carácter urgente la inclusión en la Lista del Patrimonio Mundial en Peligro de los elementos del Prerrománico asturiano que son Patrimonio Mundial y han sido inmatriculados por la iglesia católica

Seis de las construciones pertenecientes al estilo arquitectónico conocido como Prerrománico Asturiano son Patrimonio Mundial reconocido por la UNESCO, por lo que cuentan con el amparo internacional que representa la Convención sobre la protección del patrimonio mundial, cultural y natural”, aprobada por la Conferencia General de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (París, 1972), a la que se ha acogido el Estado español en 1982.

Recientemente se ha hecho pública la información de la inmatriculación de la práctica totalidad de los monumentos prerrománicos asturianos por parte de la iglesia católica, incluyendo varios de los reconocidos como Patrimonio Mundial y por tanto, teóricamente protegidos. Andecha Astur deduce que su privatización implica el fin de los criterios reconocidos por la Administración en lo que toca a conservación, rehabilitación, difusión y disposición para las visitas y el estudio artístico, científico y técnico de dichos monumentos, desconociéndose hasta el momento los criterios que aplicará en estos aspectos el nuevo propietario privado, la Iglesia católica.

Por tanto, desde la organización nacionalista solicitan al Centro de Patrimonio Mundial de la UNESCO «que el Centro de Patrimonio Mundial acuerde la urgente inclusión de todos los monumentos del Arte Asturiano reconocidos como Patrimonio Mundial en la Lista del Patrimonio Mundial en Peligro”, para garantizar su especial protección en estos momentos de grave incertidumbre sobre su futuro y que se abra inmediatamente una investigación sobre su situación real.

Así mismo, señalan la responsabilidad del estado español, por permitir el paso de titularidad pública a privado de estos monumentos, incumpliendo el artículo 5, letra d, de la Convención sobre la protección del Patrimonio mundial, cultural y natural  y, como cómplice de este proceso de inmatriculación, al gobierno del “Principado”, por su negativa a facilitar el listado elaborado de modo oficial por el Colegio de Registradores de la Propiedad de Asturies, en el que se recogen dichas inmatriculaciones.

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