Apenas unos cientos de personas han recibido a la familia real española a su llegada a la catedral, y el concierto al que acudieron por la tarde ha estado acompañado de actos franquistas en el exterior, en los que se cantó el cara al sol haciendo el saludo facista ante la indiferencia de la policia
La esperada recepción de su majestades en la primera visita de la heredera del trono no ha tenido la repercusión que esperaban. En cambio, hoy la usual manipulación propagandística del regimen muestra fotografias de una plaza colmada de gente recibiendo a los reyes entre decenas de banderas de España. Dejando a un lado que las banderas las dejó puestas el Ayuntamiento de Uvieu como decoración previa al evento, la realidad -como recoge la imagen tomada desde el ángulo opuesto- era una plaza vacía con los pocos asistentes estrategicamente colocados en primera fila para dar impresión de multitud.
A la tarde los reyes acudieron al Auditorio Príncipe Felipe, entre grandes medidas de seguridad. La fuerte presencia policial no impidió a los nacionalcatólicos de la Hermandad de Defensores de Oviedo llevar a cabo su acto facista, delante de la virgen que decora el exterior de la Iglesia de la Gesta, a unos metros del Auditorio. Un grupo de neonacis hacían el saludo facista mientras cantaban el «Cara al sol», lanzando consignas a favor de la unidad de España y gritando «Viva Franco» sin que en ningún momento la policia haya intervenido para detener el acto. En su página los defensores reconocen la presencia de «compañeros» venidos desde Sevilla y otros lugares de España para la ocasión.
La Gesta es un edificio en el que, curiosamente, no se aplica la Ley de Memoria Histórica, estando sembrada de simbología facista tanto en su interior comu su exterior.

Llucía F. Marqués

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