Antes de la crisis, 8 de cada diez asturianos sin empleo cobraba alguna prestación. Hoy, solo cinco de cada diez hombres y cuatro de cada diez mujeres cuentan con esta protección por desempleo

La situación crítica en la que viven muchas familias, con uno o varios o todos sus miembros en situación de desempleo (por cierto, estos últimos más cada vez) se agrava con los recortes en cobertura que dejan en Asturies un panorama inquietante.

La tasa de cobertura se calcula dividiendo el número de perceptores de alguna prestación entre el número de personas desempleadas, pero sin tener en cuenta a aquellas que no han estado aún contratados. En Asturies esta cifra da un dato cercano al  46%, ello es, más de la mitad de los asturianos que están en paro no lo cobran, siendo esta situación mucho más grave entre las mujeres, ya que nada más el 40% perciben algo.

El aumento del paro de larga duración, con un 53,1% de desempleados con más de un año en busca de trabajo es uno de los factores que explica este problema, junto con los trabajos de alta precariedad y baja duración que hacen difícil cotizar lo suficiente para tener derecho a un subsidio.

Estas cifras colocan a Asturies muy por debajo del Estado Español, con una tasa de cobertura del 58 % y con comunidades -como es el caso de Baleares- en las que el 88% de la población desempleada cobra el paro. Además, esta disimilitud parece ir creciendo según se va “saliendo de la crisis”, quedando Asturies atrapada en los peores datos mientras se dibuja un escenario general de avance, mostrando que la tan nombrada “recuperación” no está sintiéndose en Asturies como en el resto de Europa.

Llucía F. Marqués

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