A raíz de que la última escuela feminista Rosario Acuña pusiera en su edición de este año en tela de juicio los aspectos fundamentales de la teoría queer, XEGA ha iniciado una recogía de firmas “por un feminismo inclusivo, plural y diverso”

Para el colectivo los planteamientos de la escuela son una falta de respeto impropio de la calidad de las ponentes e innecesaria para el pretendido debate sobre las implicaciones de la práctica feminista”. Acusan a la escuela de plantear un pensamiento unívoco y no un espacio de debate y a las participantes de erigirse como portavoces únicas y válidas del feminismo, despreciando cualquier otra visión u opinión discordante, sin atender a argumentos y les recordaron que el feminismo es un movimiento, y como tal debe evolucionar “No solo es necesario, sino enrriquecedora, la inclusividad de la realidad trans en el desarrollo del feminismo del siglo XXI”.

Por tanto, ven la necesidad de apostar por un feminismo abierto y plural, incluyente, que defienda la diversidad de las personas, que denuncie la desigualdad social por la identidad de género, también en el caso de las mujeres trans y que sea solidario con todas las desigualdades sociales “de las que no podemos desligarnos, como es la desigualdad racial, económica y estructural”.

Nuria Prendes

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