De acuerdo al Informe de Rentas Salariales del último año, en el que se recogen las cifras oficiales de empleo y salario del 2.017, se constata una pérdida de casi de 60.000 empleos en Asturies en los últimos diez años, la mayor caida del Estado
Los datos basados en la memoria del Agencia Tributaria: ‘Mercado de Trabajo y pensiones en las fuentes tributarias’ recogen el paso de 439.553 empleados en el año 2.008 a nada más 379.778 del 2.017, lo que representa una pérdida de empleo asalariado en Asturies del 13’6% desde el año antes del inicio oficial de la crisis, el 2.008, hasta el pasado 2.017. En estas cifras aún no un están incluidos los empleos perdidos con el cierre de los últimos pozos mineros ni los vinculados al cierre de Alcoa, ya que la Agencia Tributaria trabaja con datos un año anteriores.
Estas cifras nos situan a la cabeza de pérdida de asalariados de todo el estado, por delante de Castilla y Galicia. La media del estado español es del 0’6%, es decir, una bajada casi nula en el resto de territorios.
En lo que respecta a salarios, de esos casi 380.000 asalariados actuales, 67.687 cobran menos de medio SMI (7.000 más que en el 2008), uno de cada cuatro trabajadores asturianos cobra menos del SMI y uno de cada cinco gana menos de 2.000 € al año; pero al mismo tiempo se han dividido a la mitad los salarios más altos, pasando de casi 3.000 asturianos que ganaban más de 10 SMI a solo 1.400, así que más que de falta de equidad en el reparto de la riqueza entre los asturianos estamos hablando directamente de pérdida global de la misma.
Mientras tanto, el salario medio anual ha subido en 276 €, ello es, un 1’4%, en el mismo periodo que la inflación ha medrado un 11’4%, lo que quiere decir que el poder adquisitivo real de la población ha bajado en un 10% en estos diez años. Además, el incremento de los trabajos a tiempo parcial y de breve duración agrava la precariedad laboral, de lo que deriva una fuerte reducción general del nivel de vida y del acceso a recursos. La precariedad viene de la mano del incremento de las empresas multiservicio, los falsos autónomos y las subcontratas; las ETT’s suponen en algunos sectores más del 50% del personal contratado.
Ante estos alarmantes datos, disponibles desde fin de año, aún no un se ha dejado oir ninguna declaración de los sindicatos asturianos.
Llucía F. Marqués
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