La asociación cultural española «Hispania Nostra» acaba de publicar un catálogo patrimonial en el que se recogen algunos monumentos asturianos al límite de la extinción. La larga lista da una idea del abandono y la desidia que padecen estos testigos de la historia nuestro país

Dentro la larga serie de edificios históricos abandonados incluídos como de alto riesgo de extinción en el catálogo patrimonial presentado por el comité científico de la reconocida institución «Hispania Nostra» aparecen monumentos como la Torre de San Andrés d’Agues, en Al.ler, los monasterios de San Antolín de Bedón, en Llanes, San Salvador de Curniana y el de Santa María la Real de Obona, en Tinéu, la casa de los Bernaldo de Quirós, en Candás, el Palacio de los Faes de Miranda, en L.lena o la iglesia de San Cipriano, en L’Infiestu, y la de San Pedro de Plecín, en Peñamellera Alta.

En especial situación de extinción se encuentra el palacio los Faes de Miranda, en Carabanzo (L.lena), un torreón costruido en el siglo XVII, abandonado desde el 34 y que precisa una intervención urgente, valorada en cerca de 1’2 millones de euros, si no se quiere que desaparezca definitivamente en los años venideros.

La desaparición de estos monumentos no implica nada más una pérdida arquitectónica y artística de enorme trascendencia, si no que con ellos se pierde la posibilidad de ahondar en la historia de Asturies y de mantenerla en pie para generaciones venideras.

Llucía F. Marqués

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