La conseyería d’Educación reconoce la especial dificultad del trayecto hasta el colegio de El Villar, y  se compromete a mantener el servicio gratuito a todos los escolares

Desde que en  la Asociación de Padres y Madres tuvieron conocimiento del recorte en el servicio de autobús, a finales del curso pasado, no han parado de moverse para evitar que en septiembre sus hijos se vieran sin transporte. Numerosas manifestaciones y reuniones les ayudaron a conseguir el apoyo del Ayuntamiento de Uvíeu, que los respaldó en sus negociaciones con la Conseyería de educación, que se ha comprometido a ajustar las rutas para que todos los escolares , aunque vivan a menos de un kilómetro y medio de distancia , tengan asegurada la plaza, aunque la solicitud de cobertura excepcional tendrá que solicitarse cada curso

Las familias, que permanecieron a las puertas de la Conseyería mientras duraba la reunión, se mostraron “satisfechas”, aunque creen que “en cierto modo, es un parche tener que alegar cada curso lo mismo en tan breve plazo de tiempo” e insiten  en que el transporte para todos es un derecho que con la solución provisional queda en el aire cada curso.

Además esa autorización queda supeditada a que haya plazas libres en las rutas “y en el caso de El Villar varias ya están saturadas”.

El cierre de el colegio de Soto crea una complicación adicional, puesto que se hará necesario crear una nueva ruta que recoja a sus antiguos alumnos para llevarlos a El Villar, algo a lo que se ha comprometido el director del Consorcio de Transportes, quien tambié prometió se estudiar la necesidad de reestructurar las rutas de manera que todas las solicitudes sean atendidas.

Llucía F. Marqués

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