Fue la primera expresión electoral de una izquierda asturiana rupturista

Con motivo de la convocatoria en el Reino de España de unas elecciones para Cortes Constituyentes, que se realizaron el 15 de junio de 1977, fue articulada la candidatura de Unidad Regionalista, que representaba un proyecto de ruptura democrática con la oligarquía franquista desde la izquierda y desde Asturies.

La llamada «Transición» implicó una serie de pactos entre, por un lado, la antigua clase política de la dictadura, y por otro, algunos partidos opositores con peso histórico, como el PCE, el PSOE o el PNV. Sin embargo sectores importantes de la izquierda revolucionaria cuestionaron el nuevo marco político desde el primer momento, y algunos de ellos plantearon diversas candidaturas de unidad popular desde las luchas sociales propias de cada realidad nacional concreta.

En ese marco surgió en Asturies la plataforma de Unidad Regionalista, impulsada por independientes como el abogado ovetense Antonio Masip, y con el apoyo de partidos políticos que vieron bloqueada su legalización por el Gobierno Suárez como el Movimientu Comunista d’Asturies.

Finalmente soló obtuvo unos 10.821 votos (1,88%).

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