Desde el comienzo de la actual recesión económica la aportación asturiana a la investigación ha caído un 26%, partiendo ya de niveles previos lamentablemente bajos

La inversión asturiana en investigación y desarrollo está en su nivel más bajo de los últimos doce años, registrando su mayor caída en el año 2015 , cuando fue más brusca la reducción de la inversión en investigación y retrocediendo desde que entonces.

El repliegue del conjunto de la inversión empresarial se une a los recortes presupuestarios en las Administraciones para dibujar un triste escenario en el que, a pesar de la actividad desarrollada por las multinacionales Arcelor y Thyssenkrupp (que son las que más invierten en estos campos), la investigación sigue cayendo.

La I+D (Investigación y Desarrollo) se considera un pilar del progreso económico y social de cualquier país, siendo así que el mapa europeo de la I+D coincide notablemente con el de la riqueza, coincidiendo las regiones de mayor apueste económico por la investigación con aquellas de mayor PIB.

En el caso asturiano esta indolencia es aún más grave debido a lo relevante del sector industrial en nuestra economía, ya que se trata de un sector muy influenciado por los avances tecnológicos derivados de la investigación.

Llucía F. Marqués

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